
El 5 de marzo de 2025, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), el principal sindicato de los empleados públicos en Argentina, organizó una masiva protesta en Buenos Aires, en rechazo a la nueva ola de despidos en el sector público impulsada por el gobierno de Javier Milei. La manifestación, que comenzó a las 09:30 de la mañana, refleja el creciente descontento dentro del sector público, que se ve afectado por una serie de políticas de ajuste que, según los dirigentes sindicales, buscan desmantelar el Estado y sus políticas sociales.
La protesta de ATE fue motivada por la decisión del gobierno de continuar con la reducción de personal en varias dependencias estatales, una medida que, según Rodolfo Aguiar, secretario general del sindicato, responde a una política que «niega la justicia social» y no toma en cuenta la necesidad de un Estado que promueva el bienestar común. Aguiar, durante su intervención en la protesta, acusó al gobierno de recortar servicios públicos esenciales sin una justificación técnica o profesional, afectando gravemente a los sectores más vulnerables de la sociedad.
La Defensa de los Servicios Públicos
En su discurso, Aguiar destacó que con estos despidos, el gobierno no solo perjudica a los trabajadores del sector público, sino que también pone en riesgo la continuidad de políticas sociales clave. Según el sindicalista, los despidos masivos son una forma de destruir los pilares de contención social que, a lo largo de los años, han ayudado a las poblaciones más empobrecidas de Argentina. Para ATE, la implementación de estas medidas refleja una falta de compromiso con los sectores que más dependen del Estado para acceder a servicios básicos y asistencia social.
El sindicato también hizo un llamado a intensificar las protestas y a unirse en una medida de fuerza generalizada. En este sentido, convocó a un plenario federal el 11 de marzo para discutir los próximos pasos en su plan de lucha. Según Aguiar, el gobierno de Milei se sostiene solo gracias a la «ficción económica» y está perdiendo apoyo popular debido a su creciente autoritarismo. La postura del sindicato es clara: las políticas de ajuste solo empeoran la situación social y económica, y es urgente cambiar de rumbo.
Un Contexto de Crisis y Descontento
El 5 de marzo también coincidió con un apagón masivo en Buenos Aires, que dejó a más de 620.000 usuarios sin luz durante una ola de calor. Esta interrupción del servicio, que afectó a casi dos millones de personas, incluido el edificio de la Casa Rosada, se suma a una serie de crisis energéticas que han afectado al país en los últimos meses, agravando el malestar popular. Este tipo de situaciones, junto con los despidos en el sector público, contribuyen a la creciente presión sobre el gobierno de Milei, que, mientras se prepara para un viaje a España y otros países, enfrenta un panorama interno complicado.
Rechazo a las Políticas de Ajuste
La protesta también tuvo lugar en un momento crítico para el presidente Milei, quien tiene programado su tercer viaje a España, donde recibirá un premio en Madrid. Mientras tanto, el país sigue lidiando con tensiones sociales derivadas de las políticas de ajuste, que afectan tanto a los trabajadores del sector público como a una gran parte de la ciudadanía, que ya comienza a mostrar un fuerte rechazo a las políticas del gobierno.
En resumen, la protesta de ATE no solo refleja la creciente insatisfacción con los despidos masivos, sino también un rechazo a las políticas de ajuste que, según los sindicatos, están desmantelando el Estado y perjudicando a los sectores más vulnerables. En un clima de crisis energética y social, el futuro de las políticas públicas del gobierno de Milei está siendo seriamente cuestionado por los trabajadores y la sociedad en general.
Fuente: https://humoyespejos.com.ar/protesta-de-ate-contra-la-nueva-ola-de-despidos-en-argentina-un-clamor-por-la-justicia-social-por-hector-ramirez/